MorganMorgan

La de Morgan es una de esas historias que te dejan el corazón tocado, de esas que te hacen preguntarte con miedo hasta qué punto puede llegar la crueldad humana.

Morgan era un gato casero que vivía en Morgadans y salía diariamente a pasear. En uno de esos paseos fue acribillado a balinazos y, aún no sabemos cómo, fue capaz de arrastrarse hasta la puerta de su casa donde permaneció, tirado medio moribundo, hasta que por suerte, una chica que lo vió lo recogió y nos dió el aviso.

Tenía la cadera y el fémur rotos, estaba paralítico de la parte de atrás. No veía por el ojo derecho, tenía una pancreatitis, líquido en el abdomen…Tras mucho tiempo de cuidados y tratamiento, nuestro pequeño salió adelante y la pérdida de visión del ojito es la única secuela que la ha quedado del calvario que tuvo que sufrir.

El autor de semejante atrocidad fue localizado por la Guardia Civil y Políca Local y lo llevamos a juicio. Fue condenado por delito contra animal doméstico. Pena de 3 meses de prisión (que no cumplió por no tener antecedentes), 600 euros de multa, retirada del permiso de armas y pago de los gastos veterinarios ocasionados. Interpusimos denuncia también contra los dueños de Morgan por no socorrer a su gato y permitir que estuviera en ese terrible estado durante horas, pero dicha denuncia no conseguimos que saliera adelante.

Morgan vive ahora feliz en su casa de acogida, sigue disfrutando muchísimo de sus paseos controlados al aire libre y agradece con sus ronroneos el amor y la protección que sabe que ahora tiene.