Shelly es una de los gatos de Sárdoma, estaban en mal estado en general, los atendimos y castramos, pero Shelly es uno de los que se quedó en el refugio. En general todos tenían una diarrea horrible, flacos, neumonías por parásitos pulmonares etc. Además ella tiene pinta de ser una gatiña mayor.
A base de tratamiento, Shelly se fue poniendo bonita y su diarrea mejoró. Pero tras revisar sus analíticas y ver los valores de hígado tocados, se le hizo una ecografía, y una punción, ya que por las imágenes se sospechaba de cáncer en el hígado. Posteriormente se abrió para sacar una mejor muestra tanto de intestinos, que estaba engrosado, como de hígado (con unas pintas blancas) para biopsia y descubrimos casi con toda seguridad, que lo que tiene es un IBD (Enfermedad inflamatoria intestinal felina), va a necesitar tratamiento y dieta toda su vida, pero es un pronóstico mejor que el que pensábamos, aunque los gatos con IBD pueden acabar en linfoma.