Patuco fue recogido de una colonia en Gondomar que se había asentado en la finca de un particular y que habíamos empezado a esterilizar. Nos avisaron de que uno de ellos tenía unas heridas sangrantes en la pata que resultó ser una pododermatitis.
Ha estado con un tratamiento que le ha ido realmente bien y a día de hoy, está perfecto.
Patuco es un gatazo increíble, un buenazo al que le encantan los mimos y que le cojas en el colo y al que no le costó nada adaptarse a convivir con tantos gatos porque es además, muy sociable y juguetón.
Por suerte, con todas esas buenas cualidades, Patuco ha conseguido una familia que ahora le da todo el amor posible.