Delfina venía de la colonia del Tercio de Afora que tuvimos que retirar tras aparecer varios gatos muertos, víctimas de la maldad humana.
A lo largo del año se realizan muchas operaciones para la extracción de piezas dentales por las molestias y dolor que les ocasionan y en la mayoría de los casos, tras la operación, el animal se recupera. Pero el de nuestra pequeña fue uno de los pocos casos extremos, con el agravante de que era una gata viejiña, de infección grave en la boca y la operación no funcionó. El tercer día de postoperatorio comenzó con vómitos negros, que podría ser a causa del sangrado de la boca, pero en los análisis se detectó que era un problema más grave, y estaba perdiendo sangre, por lo que comenzamos con las transfusiones urgentes para salvar la vida de la gata.Por desgracia la gata falleció tras la tercera transfusión. En la necropsia se determinó que tenía una úlcera enorme en el estómago, no sabemos el motivo, pero por ahí perdía la sangre que no lograba recuperar. Lamentablemente, no podíamos ni pudimos hacer nada por ella, lo intentamos pero no fue posible. Sentimos pequeña, no haber detectado esa úlcera antes.