Mario, que así lo bautizó la persona que se paró, se molestó y lo auxilió, estaba convulsionando en el Camiño das Castiñeiras entre Saá y Beade. Suponemos que, o bien lo atropelló un coche, o ingirió algún tóxico.
Mario es un poco huidizo y tiene muchísimo miedo. Está perfectamente adaptado con sus compañeros felinos, pero por ahora del ser humano no quiere saber nada. Sólo necesita tiempo y paciencia, y en una casa el proceso sería mucho más rápido. ¿Te animas?
Actualización Junio 2020
En enero tuvo varios bajones a causa de la enfermedad, la inmunodeficiencia activa, comienza con un inicio de insuficiencia renal, tiene anemia y algo de fallo neurológico, así que se encuentra en una casa de acogida donde ha bajado la guardia por completo y, el gato arisco y miedoso que conocíamos, se ha convertido en un mimosón y experto ronroneador.
Apadrinado por Sonia Portela 🙂
Diciembre 2020 -> Nuestro precioso Mario fallecido 🙁